En una situación inédita en las relaciones con Caracas, el régimen de Nicolás Maduro prohibió el sobrevuelo de Aerolíneas Argentinas sobre el espacio aéreo venezolano. Ello afecta rutas comerciales que deben ser desviadas por la empresa de bandera nacional.
Principalmente las que se dirigen a Punta Cana, dijeron desde la empresa. Otras fuentes consultadas por fuera de Aerolíneas aseguraron que afecta también vuelos que van a Miami y Nueva York.
Y afirmaron que el régimen chavista también rechaza el sobrevuelo de aviones privados con matrícula argentina.
Ello llevó al ministerio de Relaciones Exteriores a enviar dos notas de reclamo al régimen chavista. Y además la embajadora de Maduro en Buenos Aires, Stella Lugo fue convocada a la Cancillería hace semanas por este asunto. La diplomática chavista tomó nota del relcamo, pero no se produjo ningún cambio. Los vuelos de Aerolíneas siguen sin poder transitar el espacio aéreo venezolano.
En el Gobierno creen que se trata de una venganza por la entrega del Boeing de Emtrasur Cargo a los Estados Unidos, donde la justicia lo reclamaba por estar sujeto al esquema de sanciones y embargos contra Venezuela e Irán.
“Aerolíneas Argentinas informó a Cancillería sobre un impedimento de utilización del espacio aéreo venezolano. Nunca se especificaron los motivos por los que instrumentó dicho impedimento, que resulta en una afectación operativa mínima para la aerolínea”, señalaron a su vez fuentes de la empresa consultadas por Clarín. No dijeron nada más.
El humor para con el régimen de Maduro y su actitud hacia la Argentina es de mayor irritación que lo que refleja la información de la empresa, y hacen gestiones para destrabarlo.
Incluso evalúan recurrir Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), el organismo de las Naciones Unidas que establece la cooperación aérea y que el uso de los cielos esté bajo beneficio mutuo. El tema lo siguen directamente con la ministra Diana Mondino, su vicecanciller, Leopoldo Sahores, y el subsecretario de Asuntos Americanos, Mariano Vergara.
En total hay cuatro vuelos de Aerolíneas a República Dominicana por semana, que desde hace un mes se ven obligados a desviarse hacia los cielos de Guyana según indicó una fuente oficial a Clarín. Hay entre nueve y diez por semana a Miami, y unos dos o tres a Nueva York. En cambio no hay vuelos directos de Aerolíneas Argentinas desde Buenos Aires a Caracas.
Al mismo tiempo, si bien las fuentes consultadas en Aerolíneas señalaron que no se les especificó el motivo, la sucesión de hechos hace pensar a la Rosada y a la Cancillería que se trata de una suerte de sanción del régimen chavista para con este país por las tensiones alrededor del avión de Emtrasur Cargo, que en realidad surgieron bajo el gobierno de Alberto Fernández.
El Boeing 747-300 adaptado como carguero fue retenido en Ezeiza en junio de 2022 por el juez Federico Villena y a pedido de la justicia de Estados Unidos. Había sido vendido por la empresa iraní Maham Air a Emtrasur, de Venezuela, y estaba sujeta al complejo sistema de sanciones de los Estados Unidos por supuesto uso para actividades terroristas internacionales. Boeing es de origen estadounidense. También hay sanciones para con las aerolíneas chavistas.
En ese momento también fue investigada la tripulación de 14 venezolanos y cinco iraníes por posibles vínculos con el terrorismo. Pero tras meses de estar retenidos en Buenos Aires debieron ser liberados al no encontrarse pruebas contra ellos. Igualmente, tampoco se supo a qué vino a este territorio ese avión de carga sin destinatarios que lo hayan contratado.
Lo cierto es que Maduro hizo desde la primera hora una campaña nacional en Venezuela acusando a la Argentina y a Estados Unidos de “secuestrar el avión”.
En el desierto de Arizona, el Gobierno de USA mantiene un cementerio de más de 5.000 aviones, degradando el ambiente del planeta. Ayer despedazaron el avión de EMTRASUR, para desmoralizar al pueblo venezolano y demostrar su carácter imperial. Hoy se cumplen 20 años del llamado… pic.twitter.com/92OIuat6Ue
— Ramón Celestino Velásquez Araguayán (@rvaraguayan) February 29, 2024
En las ultimas horas del envío de la aeronave a Estados Unidos en febrero pasado hubo un episodio oscuro en el que se descubrió al número dos de la embajada de Venezuela en la Argentina tomando fotos al avión en Ezeiza. Tenía además credenciales falsas. Luego, lo declararon «persona non grata» y se tuvo que ir.
Si bien la embajadora Lugo permanece en el país, el gobierno de Milei decidió enviar solo un encargado de negocios a Caracas.
Finalmente el Boeing fue llevado de Ezeiza a los Estados Unidos por los alguaciles de ese país y por agentes del FBI que lo tuvieron bajo custodia. Fue el 11 de febrero.
Durante las sesiones de la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que se hizo a fines de febrero en San Vicente y las Granadinas, a la que el Gobierno envió como representante nacional al vicecanciller Leopoldo Sahores, Maduro cargó contra la Argentina por el tema del avión mientras en Caracas, los venezolanos mostraban por redes imágenes que demostrarían que el avión fue destruido en el desierto de Arizona.
En esa sesión, Argentina quedó en la vereda de enfrente de Luiz Inacio Lula da Silva y del dictador venezolano. Ocurre que el brasileño propuso una moción de la Celac para exigir el «fin inmediato» de lo que llamó el “genocidio» de Israel contra el pueblo palestino en la Franja de Gaza, y el Gobierno, a través de Sahores, se opuso a ello tajantemente.