Yanina Latorres es una de las voces más picantes de la televisión argentina, reconocida por no tener filtro ni miedo en dar a conocer su opinión. Lo cierto es que la panelista de LAM (América TV) reemplazó a Ángel de Brito, que se tomó unos días de vacaciones y se ausentó de la conducción de su programa. Sin embargo, al inicio de la edición del martes, la angelita lanzó un profundo descargo sobre lo difícil que es estar al frente y esbozó algunos palitos contra los entrevistados que le fallaron.
Latorre es una de las favoritas del periodista para ocupar su sillón cuando se va de vacaciones, por ende, siempre que él se ausenta, debe continuar con el trabajo de conducción y la responsabilidad que esto conlleva. Sin embargo, en esta oportunidad no salió todo como se lo esperaba y a pesar de los anuncios sobre ciertas notas que saldrían al aire, la rubia mostró su enojo.
“Qué difícil es hacer televisión. Qué difícil es ser Ángel de Brito. Ángel, si nos estás mirando, no te tortures con el programa, andá, seguí tu vida. Ahora lo entiendo”, empezó Latorre y continuó con ironía: “Todo el mundo me dice: ‘¿Por qué no conducís? Estás para conducir’. Pero lo cierto es que media hora antes del programa todos te bajan los temas”.
“Hoy a la mañana produjimos todos, con los chicos, con todos. Teníamos gente, [entrevistas por] Zoom, invitados y 20.10 me bajaron todo”, agregó furiosa la conductora y le remarcó en tono de broma a Nazarena Vélez: “Vas a tener que inventarte algo… Pero bueno, lo difícil que es ser Ángel de Brito. La verdad que lo compadezco”.
“¿Vos decías que a Ángel también le bajan todos los temas?”, preguntó Nazarena, a la vez que Yanina respondió: “Pero sí. Hay que rascar entre las piedras, audios llorando de la gente, pedidos, gente enojada… Chicos, es televisión, todo es humor. Todos trabajan en la tele, todos quieren hacer quilombo, pero cuando les toca el quilombo, le tienen miedo a LAM”.
En medio de los comentarios y la intriga de las panelistas para conocer a los culpables de que se quedaran sin poder transmitir el material que habían preparado para la jornada, la también conductora radial sentenció: “No sé qué tenemos. Acá no quieren que se toque nada”.
“Para que nos bajen los temas tiene que ser gente muy importante”, insistió Nazarena, y su compañera contestó determinante: “No, acá hay cada cuatro de copas que se cree importante, que estoy podrida”.
Para cortar con el descargo y la molestia de la conductora, Matilda Blanco interrumpió y destacó el vestuario que eligió. Luego de ello, Yanina se apartó de la escena principal y presentó uno de los asuntos de la noche, la presunta separación de Marcelo Tinelli y Milett Figueroa: “Vamos a arrancar con el primer tema del día, si se enoja, problema de él”.
De este modo, Yanina Latorre continuó con la rutina y dejó de lado su furia. Cabe destacar que LAM es uno de los programas de espectáculo más polémico, por lo que mucha de la información que se trata allí, tarde o temprano, termina por marcar agenda en ese rubro.
LA NACION