jueves, 4 julio, 2024
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Bailar para el diablo: la historia de la secta de tiktokers que es furor en el streaming

La docuserie cuenta el caso de varios bailarines con millones de seguidores vinculados a una iglesia encabezada por el pastor Robert Shinn, a quien acusan de abuso sexual.

Julián Padilla

Los miembros de 7M (Foto: Netflix)

Los miembros de 7M (Foto: Netflix)

¿Cuántas veces al día abrimos TikTok y nos topamos con bailarines profesionales haciendo coreografías de una canción? Muchas. Lo que jamás imaginamos es que detrás de esos videos virales puede llegar a existir una secta detrás.

Así lo revela la docuserie de Netflix Bailar para el diablo: la secta de 7M en TikTok, que expone el calvario de bailarines que fueron cooptados por el pastor estadounidense Robert Shinn, líder de la Iglesia Shekinah.

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¿Cómo reclutaba a sus miembros? El empresario es dueño de una productora audiovisual con sede en Los Ángeles, y les prometía a los bailarines -que recién estaban comenzando- dinero, popularidad y un lugar donde vivir.

Robert Shinn, creador de la Iglesia Shekinah y de 7M (Foto: Netflix)

Robert Shinn, creador de la Iglesia Shekinah y de 7M (Foto: Netflix)

Tras aceptar, de a poco, los influencers fueron dejando de contactarse con su familia, mostraban en sus redes que leían la biblia y actuaban de acuerdo a los sermones de Shinn.

La primera en notar que algo no andaba bien fue la bailarina Melanie Wilking, quien subía a TikTok videos bailando junto a su hermana Miranda Derrick, que tenían millones y millones de visualizaciones.

Miranda comenzó a salir en marzo de 2022 con otro joven bailarín llamado James “BDash” Derrick-hoy su actual esposo-quien pertenecía a 7M. En ese momento, BDash invitó a las hermanas Wilking a una cena en la casa de Robert Shinn para sumarlas a la productora.

Melanie y Miranda Wilking (Foto: Netflix)

Melanie y Miranda Wilking (Foto: Netflix)

La reunión se tornó rara cuando el empresario le dijo a una de las presentes en la que si en ese mismo momento se moría, ella se iría al infierno, así que procedió a “sanarla”.

En rigor, la lista de los bailarines captados por Shinn la integran Miranda Derrick, James “BDash” Derrick, RainO, Vik White, entre otros. Por otra parte, en el documental brindan testimonios Kylie Douglas, Kevin “Konkrete” Davis, Aubrey Fisher-Greene y Kailea Gray, bailarines exmiembros de la secta 7M.

Cómo funciona la secta que creó Robert Shinn

Robert Shinn es el CEO de 7M FIlms Management Company y también es pastor en la Iglesia Shekinah. El empresario asegura que su productora y la iglesia funcionan de manera independiente y no hay conexiones entre ellas. Sin embargo, exempleados de ambos lugares acusaron al hombre de comportamientos manipuladores.

En los papeles legales, Shinn describe a Shekinah como “un pequeño y muy unido grupo de creyentes cristianos comprometidos a expandir el mensaje de la religión mediante el estudio y la extensión religiosa pacífica”.

Poco se sabe sobre el paradero de Robert Shinn en la actualidad, pero sí se conoce que actualmente vive en Los Ángeles con su hijo Isaiah. En respuesta al documental de Netflix, su empresa 7M presentó una declaración sobre las acusaciones de la familia de Miranda Derrick al Daily Mail.

Robert Shinn en la actualidad (Foto: Netflix)

Robert Shinn en la actualidad (Foto: Netflix)

“A pesar de las afirmaciones de su familia, Miranda es una empresaria exitosa y una esposa e hija amorosa que se preocupa mucho por su familia”, se lee en el comunicado. “Es patético y despreciable intentar convertir sus asuntos familiares privados en un escándalo público de mal gusto por clics e influencia. Si bien las recientes representaciones del Dr. Robert Shinn y 7M Films han sido tremendamente ofensivas y plagadas de imprecisiones, esas afirmaciones falsas no disuadirán a 7M de apoyar a Miranda en cualquier esfuerzo que decida emprender a continuación”, cierra el escrito.

Las acusaciones en contra de Robert Shinn

Por ahora, el empresario no enfrentará cargos criminales, pero fue demandado por cinco personas por abuso sexual y trabajo forzado. El juicio comenzará en 2025.

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