Hola, papá:
Esta semana me costó dormir: el domingo es el día del padre, una fecha que, como sabrás, borré durante mucho tiempo, pero que hoy es imposible no tenerla presente. Al principio de mi transición, las fiestas familiares eran difíciles. No es lo mismo ser un gay o una marica ultra ajustada, que una travesti hecha y derecha. Entonces la cosa es diferente.
A pesar de que éramos humildes, el qué dirán y la opinión de los vecinos siempre tuvieron para vos mucho peso. En nuestra familia, quizá a causa de su credo católico, la culpa estaba a la orden del día. Las fiestas que reafirmaban las tradiciones tenían peso: recuerdo Navidad, Día de la virgen, Día de la Madre y Día del Padre como las principales.