Este lunes por la mañana, el primer abogado de María Noguera, madre de Loan Peña (5), fue encontrado sin vida. Se trata de Néstor Luque, quien se encargó de la defensa de Noguera a poco de iniciarse la investigación por la desaparición del pequeño de cinco años. Más tarde, fue reemplazado por Fernando Burlando.
“Mi primo falleció hoy al mediodía. No tenía ningún problema de salud. Nada. Parece que tuvo un ataque, lo derivaron a emergencias del Hospital Base Angélica Enríquez de López. Trataron de reanimarlo. Después nos dijeron que falleció por muerte súbita. Es todo muy raro”, dijo Laura en Crónica.
Sobre la posibilidad de un atentado contra la vida de Luque, aseveró: “Estoy hablando con su hermana para que pidamos la autopsia. Necesitamos saber qué pasó. Queremos descartar todo, evacuar todas las dudas. Nunca hablamos de su trabajo en el caso Loan. Tampoco habló sobre amenazas”.
A 32 días de la desaparición del menor, los investigadores encontraron el sábado “prendas de vestir” en un rastrillaje en un río. Según pudo saber LA NACION, de fuentes con acceso a la investigación encabezada por el Comando Unificado de fuerzas federales, que incluyen a la PFA, la Prefectura Naval Argentina (PNA), la Gendarmería Nacional (GN) y a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), el operativo se llevó adelante a unos 15 kilómetros de Nueve de Julio.
“La Policía Federal Argentina halló prendas de vestir en el río Santa Lucía, a unos 15 kilómetros de la localidad de Nueve de Julio”, explicaron los investigadores y detallaron por qué fueron hasta ese lugar: “A partir del análisis de las antenas de telefonía móvil de una persona con implicancia en la causa que habría permanecido durante largo tiempo en la zona y del cruzamiento de datos, se determinó el operativo de búsqueda en ese lugar”.
Por otro lado, a partir de esta medianoche, el futuro de la investigación comenzará hoy a tomar otro impulso. A las 23.59 vence el plazo del secreto de sumario que había impuesto la jueza federal de Goya, Cristina Pozzer Penzo, cuando recibió el expediente del fuero provincial. Y, ahora, los defensores de los siete detenidos y el cuerpo de abogados que representan a la familia del niño de cinco años tendrán acceso a las pruebas que recolectó la Justicia Federal en los últimos veinte días.
Hay además alta expectativa porque se espera el arribo de los resultados preliminares de estudios comparativos de ADN de la víctima con las muestras recogidas tanto en los vehículos de dos de los acusados como en otros objetos. La prueba genética podría arrojar más luz sobre el hipotético destino de Loan Peña.
“Los fiscales solicitaron ayer que se les reciba declaración indagatoria a Bernardino Antonio Benítez, Daniel Oscar Ramírez, Mónica del Carmen Millapi, María Victoria Caillava, Carlos Guido Pérez y al comisario Walter Adrián Maciel por la desaparición del niño Loan Danilo Peña, ocurrida justo hace un mes, el 13 de junio pasado, en el paraje Algarrobal de la localidad de Nueve de Julio, provincia de Corrientes”, reza el primer párrafo del comunicado de la autoría del Ministerio Público Fiscal (MPF).
Según el escrito de los fiscales federales que llevan adelante la investigación, “lo que se ha acreditado es que Loan ha sido sustraído y ocultado del ámbito de custodia de sus progenitores, que no se ha perdido y que durante las primeras horas posteriores a su desaparición se han generado indicios en este último sentido para evitar el descubrimiento de la verdad”. “Es importante destacar que esa sustracción y ocultamiento no excluyen la existencia de otros posibles delitos de los que el niño pudiera haber sido víctima en el lugar de los hechos”, remarcaron los fiscales, que no descartan otras líneas de investigación.
También aseguraron que “existían distintos elementos probatorios incorporados al legajo de investigación que permitían afirmar ciertas premisas fácticas que rodean a la escena criminal”. Para llegar a esa premisa, añadieron, “se valoraron testimonios, análisis de dispositivos telefónicos, informes elaborados a partir de registros de canes y entrecruzamientos de llamadas, entre otras pruebas, que ubicaban a Laudelina Peña como una persona de especial interés para la investigación y con participación en el hecho. Especialmente en función de su más que sospechoso rol en el hallazgo del botín de Loan”.
Sin adelantar mayores detalles sobre la información y pruebas con que cuentan y que, hasta hoy, desconocían las defensas de los imputados, los fiscales argumentaron: “Es evidente el cambio de comportamiento de los implicados, tras el desenvolvimiento del transcurso de sucesos que derivaron en la desaparición de Loan, aun cuando antes del 13 de junio no se advierten conversaciones que hagan referencia o permitan sospechar de una planificación por parte de los imputados de un hecho de la magnitud y gravedad de la desaparición de un niño de cinco años y, de esta forma, la sustracción del ámbito de custodia de su núcleo familiar”.
“Las pruebas hasta ahora reunidas no permiten afirmar, pero tampoco descartar de plano, que el hecho imputado [la sustracción y el ocultamiento del niño] tuviera alguna finalidad de explotación de las previstas en la norma que contempla la figura de la trata de personas“, agregaron los funcionarios del MPF como una especie de “paraguas” para evitar que la Justicia de Corrientes pueda pedir el retorno de la causa a su fuero.
LA NACION