La gran araña balsa, una especie de araña que puede crecer hasta el tamaño de un ratón, fue vista nuevamente en el Reino Unido después de estar amenazada de extinción. La especie es uno de los arácnidos más grandes de Europa y puede poner hasta 700 huevos durante el período de apareamiento, que comienza cada pocas semanas.
En 2010, esta araña estuvo al borde de la extinción con la destrucción de los pantanos, su hábitat natural. Desde entonces, las organizaciones benéficas conservacionistas ayudaron a aumentar su número de manera constante, y ahora miles de ellas viven en muchas reservas naturales del Reino Unido.
Hasta 3.750 arañas hembras viven en 12 lugares solo en Norfolk y Suffolk Broads, el humedal protegido más grande del Reino Unido, estima la Real Sociedad para la Protección de las Aves (RSPB). La araña balsa vive solo en estas zonas húmedas y utiliza sus largas y peludas patas para patinar sobre la superficie del agua.
La especie, uno de los invertebrados más raros del Reino Unido, desempeña un papel importante en el mantenimiento de la diversidad acuática en el país. Su dieta incluye otras arañas, larvas de libélulas, renacuajos e incluso peces. Esta araña no es venenosa, pero puede ser “tímida”.
Alcanzan a medir entre cuatro y ocho centímetros de longitud, un tamaño común en especies de roedores como las ratas de campo y los ratones. Las hembras, que tienden a ser más grandes que los machos, a veces intentan comerse a su pareja después del apareamiento.
La araña balsa es una especie europea de la familia Pisauridae. Es semiacuática y caza a sus presas en la superficie del agua, principalmente en pantanos y marismas no contaminados. La mayoría de las especies de esta familia tienen la capacidad de saltar distancias relativamente largas, pudiendo escapar de los depredadores saltando distancias de 12 a 15 centímetros.
O Globo/GDA