La directora del jardín Mi Estrellita N°39, de Wilde, donde denunciaron a un profesor de educación física por abuso, fue apartada de su cargo, junto con la vicedirectora, ante el reclamo de los padres contra la institución.
En las últimas horas se informó que el docente volvió a estar en el ojo de la tormenta ya que padres de otro Jardín –el 901 de Avellaneda– donde también trabajaba el profesor, denunciaron que hay cuatro casos de esta misma índole.
En la primera denuncia hay al menos 20 menores sufrieron algún tipo de tocamiento por parte del docente. “Lamentablemente este desgraciado abusó de más chicos. Esto se tiene que conocer para que no quede impune”, expresó con dolor Natalia, una de las mamás denunciantes. La mujer contó que la directora y la vice fueron apartadas de la institución donde concurre su hija.
“Este martes se define qué pasa con las maestras. Mientras que este miércoles tengo una reunión en forma personal e individual acerca de la situación de mi hija”, detalló.
La primera denuncia
La denuncia se dio a conocer este domingo por la noche cuando los papás de la institución comenzaron a difundir la denuncia formal.
La denuncia, en la que hay testimonios adosados, detalla que una niña de 4 años y sus compañeros sufrieron tocamientos por parte del docente en el jardín Mi Estrellita N°39 de Wilde.
Conforme a lo manifestado por la víctima a sus padres, el profesor realizaba diversos juegos, como por ejemplo policías y ladrones, y también «la casita», donde aprovechaba y “les tocaba la cola”.
Frente al relato de la menor, su mamá se contactó con otros padres, quienes también manifestaron que sus hijos sufrieron este tipo de abuso, motivo por el cual radicaron una denuncia en la Comisaría 5ta.
Por la falta de respuestas, el lunes pasado los padres se movilizaron a la puerta del jardín para pedir explicaciones sobre los hechos y el futuro proceder contra el docente.
El listado de «juegos»
Natalia informó que el docente, de acuerdo a lo indicado por la inspectora de educación de los jardines municipales de provincia, ya fue apartado de todos los jardines en los que trabaja.
“La verdad no les creemos nada. Ya no podemos confiar si ellos permitieron abusos de tantos nenes. Acá actuaron por inoperancia o por complicidad”, manifestó Natalia y sostuvo que las autoridades de la institución ya les “mintieron y decepcionaron”.
“Otro juego era el juego del ‘pajarito y la tormenta’, que cuando sonaba un pajarito en una canción, ellos tenían que salir corriendo hacia un sector del salón y ponerse en cuclillas y él entonces aprovechaba los tocaba”, contó una de las madres. Otra madre dijo: “Mi hijo contó que cuando el profesor llegaba, había nenas que se metían debajo de la mesa, porque le tenían miedo”. Uno de los padres contó lo siguiente: “Mi hijo tuvo un retroceso, había dejado los pañales, pero hace dos o tres meses se empezó a orinar otra vez. Me contó lo mismo, lo del ‘pájaro y la tormenta’. Cuando le preguntábamos se ponía muy nervioso, pero después le contó a mi hijastra, le pidió que no le dijera a nadie. El nene se sentía amenazado».
La causa quedó en manos de la UFI N°2 de Avellaneda a cargo de la fiscal Mercedes Dudan especializada en delitos contra la integridad sexual, informáticos, violencia familiar y de género.