La alianza de gremios del transporte confirmó el paro sectorial del miércoles “en rechazo a las medidas de ajuste” de Javier Milei. La protesta, que durará 24 horas, afectará el normal funcionamiento de trenes, aviones, camiones, barcos y la actividad portuaria. Perderá impacto por que la conducción nacional del gremio de los colectiveros de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) desistió de sumarse al reclamo e impulsar uno propio para el 31 de octubre. Sin embargo, podrían adherir algunas seccionales rebeldes de la UTA.
De acuerdo a los gremios que impulsan la huelga, los siguientes servicios estarán afectados el miércoles próximo:
Trenes: el gremio de los maquinistas de La Fraternidad, a cargo de Omar Maturano, es uno de los impulsores del paro. Si bien la Unión Ferroviaria, el otro gremio que talla fuerte en la actividad, se desmarcó de la protesta el servicio de pasajaeros de corta, media y larga distancia no funcionará como tampoco el de cargas.
Subte porteño: habrá cese de actividades en todas las líneas. Roberto Pianelli y Néstor Segovia, el número uno y dos del sindicato de los metrodelegados, se sumaron a la Mesa Nacional del Transporte que encabeza Pablo Moyano.
Aviones: adhieren cinco de los ocho gremios más importantes del sector. El sector aeronáutico es particularmente sensible a la conflictividad gremial porque basta con que adhiera una sola rama para que la actividad se detenga. No habrá vuelos de Aerolíneas Argentinas y podría haber demoras y complicaciones con el resto de las líneas aéreas, en las que no hay fuerte presencia gremial.
Además, se suman los estatales de ATE, que tienen injerencia en el gremio de Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), el Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (ORSNA), Vías Navegables, la Junta de Seguridad del Transporte, el exministerio de Transporte, la Junta de Seguridad en el Transporte (JST) y la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT), entre otros.
El gremio que reúne a los trabajadores de las líneas aéreas extranjeras dio libertad de acción, pero las compañías comenzaron a reprogranar sus vuelos ante la posibilidad de no contar con atención en tierra, ya que Intercargo no prestará servicios.
Colectivos: si bien la UTA no adhiere el paro del 30, los impulsores del reclamano estiman que las cinco seccionales rebeldes que no comulgan con el liderazgo de Roberto Fernández podría plegarse al reclamo. Se trata de las seccionales de Santa Fe, Córdoba, Santiago del Estero, Jujuy y Mar del Plata. Además, en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) podría haber complicaciones con algunas líneas cuyas comisiones internas también son críticas del poder de Fernández.
Puertos: las actividades portuarias, marítimas y de los astilleros se verán afectada por la realización de la medida de fuerza, a la que adhieren los 12 gremios del sector agrupados en la Federación Marítima Portuaria y de la Industria Naval (Fempinra). De esta manera, no habrá actividad en los puertos de Buenos Aires, La Plata, Bahía Blanca y Rosario, por lo que el paro afectaría el comercio exterior.
Transporte de cargas: el sindicato de los camioneros que lideran los Moyano es uno de los impulsores del paro. Habrá cese de actividades en las 17 ramas que tiene el gremio: Aguas y Gaseosas, Caudales, Cereales, Combustibles, Corralones, Correo [solo el postal privado], Diarios y Revistas, Expresos y Mudanzas, Lácteos, Larga distancia, Lavaderos industriales, Logística, Mecánicos, Pesados, Productos Refrigerados, Recolección de residuos y Residuos Industriales.
Taxis: adhieren los dos sindicatos de taxistas, el de Peones, que lidera Jorge García, y el de conductores, de José Ibarra. Habrá, sin embargo, servicio de los propietarios de los taxis. También habrá servicio de los taxis de aplicación, ya sea Uber o Cabify.
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