Mientras en el frente interno busca allanar el camino con los gobernadores de cara al Pacto de Mayo que convocó en el Congreso, el presidente Javier Milei recibe buenas señales desde el exterior: el mandatario argentino participará en la cumbre del G7 que este año se realizará en Italia, después de haber sido invitado por la primera ministra de ese país, Giorgia Meloni.
La presencia de Milei en la reunión que nuclea a los líderes de Estados Unidos, Japón, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y Canadá fue confirmada a Clarín por altas fuentes de la Casa Rosada.
La invitación al evento que se realizará entre el 13 y el 15 de junio en la región de Apulia fue muy celebrada en Olivos, y en el entorno más cercano de Milei la calificaron como un gesto político «muy fuerte».
«Pensá que hasta hace poco éramos la vergüenza del G20«, le dijo a este medio con ironía un alta fuente del Gobierno.
Pese a que todavía falta el anuncio formal de los organizadores, Presidencia ya trabaja en la planificación del viaje, que supondrá una estadía de más de una semana en Europa, debido a que, una semana después del G7, Milei será distinguido con un premio en España. Es que, en línea con ese mensaje que ha intentado bajar desde que asumió, en el equipo del Presidente advierten que permanecer en Europa entre el G7 y la entrega de ese premio supondrá un importante ahorro en pasajes.
Hasta el momento, pese a que el cronograma de actividades aún no fue cerrado, Milei estará en el sur de Italia desde el jueves 13 al sábado 15 de junio y el viernes 21 estará en Madrid para recibir el premio del Instituto Juan de Mariana.
Además, en Presidencia definen si finalmente ese viaje incluirá una visita relámpago a Kiev, Ucrania, además de una breve estancia en Alemania para recibir otra distinción en Hamburgo. Se trata de la medalla Hayek, el premio que entrega la fundación que lleva el nombre de Friedrich Hayek, quien fuera Nobel de Economía y un referente para el libertario.
La primera ministra italiana «motorizó la invitación» al G7 que fue muy bien recibida por Milei, después del encuentro que mantuvieron el mes pasado en Roma. El Presidente y la premier italiana se reunieron en la capital de ese país luego de la visita del líder libertario al papa Francisco en el Vaticano.
Meloni, que había calificado a Milei como una «personalidad fascinante», fue una de las primeras dirigentes europeas en escuchar con atención al fundador de La Libertad Avanza. La afinidad ideológica y el vínculo que nació después de ese primer encuentro en Roma derivó en la invitación al cónclave de las potencias en la que Meloni será anfitriona.
Ese guiño del exterior fue muy celebrado en el entorno de Milei en medio de los fuertes cuestionamientos que lanzó la oposición por el aumento de casi el 50% de los sueldos del mandatario y de todo su Gabinete que finalmente derogó a través den un decreto que dio a conocer pasada la medianoche del sábado.
Había sido la diputada de Unión por la Patria Victoria Tolosa Paz quien acusó a Milei de haber firmado un decreto que aumentaba en 48% su sueldo y el de los funcionarios del Ejecutivo. En declaraciones a Clarín, el Presidente aseguró que se dio cuenta del incremento al ver el recibo y apuntó contra un decreto que había firmado Cristina Kirchner en 2010 y que ataba los salarios del Ejecutivo al del resto de los empleados de la administración pública.
La polémica por los aumentos, agitada en redes sociales por los idas y vueltas que ya había provocado la marcha atrás del Gobierno en el incremento de los haberes a diputados y senadores, derivó en un muy picante cruce tuitero entre el propio Milei y Cristina Kirchner.