El presidente de la Corte Suprema de Justicia, Horacio Rosatti, habló ante empresarios en AmCham (la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en Argentina) y le dejó una chicana a los liberales y los libertarios: «Alberdi, tan citado, a veces tan citado y tan poco leído«. Además, en medio de la judicialización del mega DNU de Javier Milei, se refirió a la seguridad jurídica para garantizar la inversión económica y lanzó: «El juez no está para reemplazar a la política».
Frente a empresarios, el juez del máximo tribunal del país, que deberá resolver en última instancia todas las medidas del Gobierno que se judicialicen, mencionó a Juan Bautista Alberdi, el autor intelectual de la Constitución nacional de 1853 y referente del presidente Javier Milei y todos los libertarios.
«Alberdi, tan citado, a veces tan citado y tan poco leído. También podemos decir que hay más de un Alberdi, hay uno que vivió en la Argentina, otro que no vivió en la Argentina y pasó muchos años en el exilio. Alberdi decía que era la carta de navegación de un país, la que marcaba el rumbo, sobre todo lo decía en un momento en el que la estatidad debía ser configurada en nuestro país», señaló Rosatti.
Así, al pasar, el titular del tribunal supremo dejó un comentario ácido sobre el prócer de los seguidores de Milei, al que incluso el Gobierno de La Libertad Avanza colocará en el anverso de los nuevos billetes de 20 mil pesos.
Y siguió hablando de Alberdi: «Estructuró su proyecto constitucional en 1852 antes que se sancionara la Constitución al año siguiente, lo decía porque había todo por hacer. Acá primero estuvo el Estado, la declaración de que esto es un Estado, después vinieron la unificación de una serie de atributos que hacen a la estatidad: la unificación del Ejército porque había milicias provinciales, la unificación de la moneda, del territorio».
«Diría que no solo la Constitución de un país es la carta de navegación, no solamente es un instrumento fundante de nuestra estatidad nacionalitaria. A veces, en situaciones de emergencia, de conflictividad social, económica, es la tabla de salvación. No es solamente el instrumento que marca el camino del barco cuando el mar está tranquilo, es también la tabla de salvación cuando el barco parece que está por naufragar en un mar complicado», aseguró Rosatti.
Horacio Rosatti pontificó la seguridad jurídica y la emparentó a la Constitución
La consideración llegó en medio de la judicialización del mega DNU de Javier Milei, por la que se encuentra frenada la reforma laboral que disponía el decreto y que encontró la resistencia de la CGT, cuyo amparo llegó al tribunal supremo.
En ese contexto, Rosatti hizo un repaso por la teoría política, en la que se centró en la «seguridad jurídica». Y habló de la incapacidad de la política para resolver situaciones que luego llegan a la Justicia.
«Hay un factor de inseguridad en el sistema de la norma, que es que la ley se puede modificar, se puede reformular, reformar y además puede tener más de una interpretación para la política, para los que la aplican, para los jueces», arrancó Rosatti ante empresarios.
«Si uno quisiera buscar una metáfora de cómo opera en un sistema capitalista competitivo la seguridad jurídica, pensando en las competencias olímpicas de saltos acuáticos, que los empresarios deben asumir el riesgo de hacer figuras cada vez más imaginativas en al aire, pero lo hacen sobre una seguridad de que van a caer en una pileta que tiene agua, esa es la seguridad jurídica», afirmó el presidente de la Corte Suprema y ex intendente de Santa Fe.
«Hay inseguridad jurídica cuando no se cumple con la Constitución. Hace un año, en este mismo foro, dije que hay que cumplir la Constitución –para lo cual hay que conocerla– cuando, por ejemplo, se emite moneda incontroladamente. Porque el art. 75 inc. 19 de la Constitución establece, como competencia del Congreso, la defensa del valor de la moneda. Y la moneda se defiende cuando tiene respaldo, y no cuando se emite sin respaldo. Porque esta es una forma de envilecer, que es lo contrario de defender», recordó.
«También se conspira contra la seguridad jurídica cuando no se cumple una sentencia judicial, especialmente si proviene de la Corte, que es el último intérprete del orden jurídico nacional. También se violenta la seguridad jurídica cuando no se cubren las vacantes propias del Poder Judicial. Como ocurre históricamente en la Argentina, que hay más de 25% de cargos vacantes de jueces en todo el país. Esta es una forma institucionalizada de conspirar contra la seguridad jurídica», señaló Rosatti.
Y en un mensaje a la política, avisó: «Y no se cumple con el postulado de la seguridad jurídica, se la desafía, cuando se judicializan cuestiones que deben ser resueltas por la política. Y esto ocurre en Argentina desde hace muchos años. La judicialización de las cuestiones típicamente políticas. Frente a la incapacidad de la política de resolver determinadas situaciones, se proyecta el problema hacia una instancia judicial».
«Podríamos elaborar un teorema: a mayor debate público, menor injerencia de la Justicia; a menor debate público, más deseo de intervención de los tribunales de Justicia. El juez no está para reemplazar a la política; está para cumplir con las normas que, entre otros fundamentos, provienen del estamento político», afirmó el miembro del máximo tribunal desde junio de 2016.