Javier Milei y Victoria Villarruel sumaron un nuevo capítulo del enfrentamiento que mantienen. La vicepresidenta se encargó de señalar a través de su entorno que no pudo asistir a la exposición rural por orden del Presidente. Mientras que el jefe de Estado apuntó directamente a su excompañera de fórmula a lo largo de su discurso.
Hasta el cierre de esta edición, la titular del Senado no había decidido si responder, una vez más, los dardos que salieron desde Presidencia hacia ella. Ante las consultas de PERFIL, su entorno insistió que pretendía estar presente en el evento palermitano, pero nunca lo confirmó de manera oficial.
Cerca de la vice se concentraron en la Casa Rosada por no “autorizar los ingresos de la gente que debe acompañar a una autoridad como la vicepresidente de la Nación”. Agregaron que tampoco aparecieron precisiones sobre los asientos correspondientes a ocupar en la sede de La Rural.
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“Nunca se indicó en qué sector debía ubicarse, tampoco su equipo, que es algo usual en este tipo de eventos. Todo corresponde y depende del área de protocolo de Presidencia”, expresaron del lado de Villarruel.
Después del incidente, que se conoció en horas del mediodía, Milei aprovechó para recargar cuestionamientos. Nunca la nombró explícitamente, pero hizo alusiones a los cuestionamientos que le propinó su excompañera de fórmula por sus viajes al exterior y a los gastos desproporcionados de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE).
“Hay críticas falsamente fiscalistas a nuestros viajes al exterior. Es innegable que han sido de provecho económico para el país y seguramente en los próximos días tendremos tremendas, tremendas noticias en el plano internacional”, dijo el Presidente.
Y añadió un disparo: “Es increíble que los viajes son criticados curiosamente por quienes gastan viaje tras viaje pagados por los viáticos del Congreso para fines personales, pasear o políticos. O… rosca. Este es el problema central de lo que Axel Kaiser llama los parásitos mentales”.
En torno a las erogaciones de la SIDE, que Villarruel criticó vía redes sociales luego de la sanción de una ley de movilidad jubilatoria y moratoria previsional, Milei aseveró: “Dicen que un gasto de 17 mil millones de dólares anuales puede ser financiado con un recorte de gastos de 30 millones en la SIDE”, sostuvo.
Continuó señalando: “Ahora la quieren desfinanciar, pero hasta hace muy poquito la querían manejar”. Porque, en plena campaña electoral presidencial, Villarruel expuso que tenía planes concretos para controlar los servicios de inteligencia, el Ministerio de Defensa y Seguridad. El Presidente lo prometió y lo blanqueó en varias entrevistas en plena carrera hacia la presidencia. No obstante, cuando selló su pacto con Mauricio Macri y el PRO, decidió otorgarles el manejo de las carteras a Patricia Bullrich, Seguridad, y Luis Petri, Defensa. El control de inteligencia quedó en manos de un hombre del asesor presidencial Santiago Caputo. Y Villarruel quedó sin injerencia en la gestión. En las últimas semanas, el jefe de Estado y sus funcionarios de confianza, como Manuel Adorni, decidieron recalibrar los disparos hacia la vicepresidenta, diciendo que no forma parte de la gestión.